La semana promete ser movidita tras el desbarajuste getafense y con la Asamblea del domingo asomando la patita por el horizonte. Lo malo no es lo que le está pasando al Real Madrid esta temporada, de derrotas a lesiones, de tufillo directivo a despecho de la afición, sino que el futuro no se presenta precisamente claro y luminoso, sino todo lo contrario.
En el aspecto deportivo, y dejo el baloncesto a un lado porque merecería un blog aparte, el Madrid está atado de pies y manos. Entre vitalicios, jugadores que llegaron gratis y cobran un pastizal y jovenes que aparecieron por aquí con etiqueta de promesas y se han quedado en mentirijillas piadosas, no hay mucho donde rascar: ¿alguien estaría dispuesto a pagarle a Saviola tres millones de euros netos por temporada, o dos largos a Drenthe? Pues eso, que tendremos que apechugar con lo que tenemos a menos que alguien se vuelva loco.
De lo que hay, me quedaría con Miguel Torres, con Marcelo, con Pepe, con Ramos, con Diarra, con Sneijder, con Robben y Van der Vaart (ambos, una temporada más y si no cumplen, bye), con Higuaín y con Van Nistelrooy. Quizás con Codina, apenas le hemos visto y no parece malo. Habrá quien diga que para qué los dos laterales, pero no desentonan respecto a lo que hay por ahí y al menos conocen al club. A Ruud me lo quedo porque, aunque esté en el ocaso de su carrera, aún puede decidir partidos con su capacidad rematadora.
También me quedaría con Guti, y no sólo para ser suplente y jugar segundas partes para que intente la heróica. Cuando hablas con canteranos que entrenan con el primer equipo, y yo lo he hecho, todos se refieren al catorce como el pilar fundamental en el que se apoyan cuando desembarcan en el vestuario. Otros ni les saludan, pese a que son la quintaesencia del madridismo para algunos. "Guti, los holandeses, Diarra y Cannavaro", dicen todos respecto a los que les apoyan cuando suben. Y no tengo que dudar de la cantera. Por cierto, mañana hablaré del caso Mata, ése que tanto indigna a algunos.
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Por cierto, está hablando Roberto Gómez en Telemadrid y dice que Di María es el mejor colocado para llegar esta misma semana. Pero a continuación dice que el siguiente es Zárate y ya estropea la cosa, debe ser el único que no sabe que el delantero es del Al-Saad y no de la Lazio: 23 millones de euros cuesta el chavalote.
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