Se lo dije ayer a Raymond K., un buen crítico aunque a veces demasiado exaltado, y allá voy: con vosotros, el programa electoral de Florentino Pérez en 1995, cuando aquellas elecciones que palmó contra Ramón Mendoza en la que los muertos se levantaron de sus tumbas. Aunque lo primero es pediros disculpas por no haber actualizado hasta ahora, estos días están siendo de locos. Y si todo va como hasta ahora, mañana sobre las 19:30 estreno portal. Pero para saber más tendréis que esperar a la última entrada de La Espinillera en Blogger, mañana por la mañana. Espero eso, que definitivamente sea la última, porque eso será una magnífica señal.
Para comenzar, diré que voy a ser constructivo en el análisis, nada de críticas, así que los que esperen acidez se van a quedar con las ganas, salvo en momentos puntuales y sólo si hubiera ocasión, que no lo sé porque escribo antes de ver qué decía hace ya 14 años. De aquella época, en la que yo era un estudiante de Periodismo más en el CEU San Pablo de Madrid mientras me doctoraba en mus, tute y pocha y que hacía sus prácticas llevando la sección de Deportes en una revistilla mensual interna de la Universidad (que dirigía Carlos Miquel, el que hace la F-1 en el AS y en la que también currelaban Juanma Cueto de Telemadrid, Juanjo Anaut de Marca, Ramón Fuentes de Telecinco y Carmen Colino y Fernando Magallón de AS entre otros muchos; y para curiosos, no, no me cogió en mi clase Elsa Lafuente, luego conocida como Pataki, estaba dos cursos por detrás mío) me acuerdo que intentamos conseguir entrevistas con todos los candidatos a la presidencia.
Lo conseguimos con Santiago Gómez Pintado, aquel ex futbolista blanco dueño de OTAYSA que patentó un eslogan que ha pasado a la posteridad (Bueno para el Madrid), la candidatura de FP siempre nos dio largas y no nos hizo ni puñetero caso (cosa lógica) y Mendoza nos mareó hasta la extenuación para no conseguir nada.
Pero volvamos al tajo. En aquel 1995, Florentino tenía 47 años (se nota en la foto, ¿no?) y era presidente de OCP Construcciones SA, ACS aún no existía. En aquel programa electoral, un tríptico, desglosaba su proyecto en nueve puntos. El primero, incidiendo en lo que por aquel entonces era el mal endémico del madridismo, la última Copa de Europa llegó en 1966 y la travesía del desierto se hacía eterna. "Europa volverá a ser nuestra", decía ese primer punto. "No podemos seguir viviendo de copas en blanco y negro", aseguraba el programa, que parece ser que por aquel entonces se acogía a la errada doctrina barcelonista.
El segundo punto versaba sobre la crisis económica de la institución ("la deuda nos asfixia") y las premisas eran similares a las de ahora: seriedad, rigor y eficacia. El tercer punto chirría de cabo a rabo. El primer proyecto deportivo de FP quedaba reflejado en él: "vamos a fomentar nuestra cantera", se titulaba, y decía cosas como esta: "ahí está nuestro futuro, en la cantera".
El cuarto también es curioso. Por aquel entonces FP no hablaba de Universalidad, o Globalización, y no había discurso evangelizador por ningún lado. "Vamos a conseguir que el Real Madrid vuelva a ser el símbolo de Madrid". Y sus palabras eran casi calcadas de las que ahora, catorce años más tarde, pronuncia Del Nido: "Prestigio de Madrid en España y de España en el mundo", decía. El Sevilla va, pues, tres lustros por detrás nuestro cuanto menos.
El resto de puntos son blablablás típicos para rellenar, nada nuevo bajo el sol. Organización responsable y eficaz, que el club nunca será SAD (sí, hace tanto tiempo ya que estamos con lo mismo), cumplir la palabra dada e imponer la transparencia informativa, recobrar la participación del socio (lo que todos dicen y nadie cumple) y la típica perorata de "estamos listos", "podemos hacerlo" y tal.
Sí, Florentino ha evolucionado desde sus inicios, indudablemente a mejor. Pero si se presentara con aquello de la cantera al poder y el localismo ahora en 2009, ¿no hubiera sido considerado un friki? Afortunadamente, las personas cambian y de esa evolución nos beneficiamos todos.
Acabo ya. En esa primera junta directiva para la que FP pedía el voto, figuraba casi la actual: Otero Lastres, Santiago Aguado, Montejano, Gumersindo Santamaría... y también ¡Ramón Calderón, Fernando Martín y Miguel Ángel Arroyo! Vaya tres patas para un banco.
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