lunes, 4 de mayo de 2009

Comienza la carrera


Comienza la carrera, sí. Ahora me gustaría ver la cara de todos aquellos que decían que la ratificación de Boluda era vital para garantizar la estabilidad del club. Si en aquella Asamblea de marzo no se hubiera aprobado al actual presidente, más o menos para esta misma semana, tal vez la que viene, estarían teniendo lugar las elecciones. Ahora toca esperar un mesecito largo, larguísimo, mientras los demás equipos llevan ya dos meses pensando en refuerzos y moviéndose en el mercado...

Total, si lo que querían era estabilidad hasta el final de la temporada, ¿a qué viene ahora correr como gamos para presentarse en cuanto suene el pistoletazo de salida, la semana que viene? ¿A qué viene filtrar interesadamente a la Prensa lo que van a hacer unos y otros, y meto a todos en el mismo saco porque hay gente que tiene la susceptibilidad a flor de piel? Hace falta un ESP urgentemente, que todavía quedan cuatro partidos para acabar y mientras que otros equipos cuando se ven sin posibilidades bajan los brazos y van de paseo nosotros no podemos jamás hacer eso, porque esta entidad tiene un crédito que no se puede dilapidar por ganar cuatro jornadas de vacaciones.

Valencia, Villarreal, Mallorca y Osasuna. Ése es el reto. Acabar como merece la tradición, el orgullo y el escudode este club: ganando. Da igual que sirva para algo o no, hay que ganar. Y después que pase lo que tenga que pasar.

Mientras, seguimos enterándonos de cositas del candidato Pérez (no le llamo de otra forma que luego hay gente susceptible y se me enfada, pero que conste que lo hago desde el respeto). As y Marca hacen bueno aquello de que a falta de pan buenas son tortas y han decidido que en vez de analizar la temporada del equipo lo que hay que hacer es huir hacia delante y comenzar a poner caramelos a los aficionados para que no se desenganchen de leer sus ejemplares impresos. Pues nada, droga dura y nada de metadona.

Ambos, además, casi coinciden, así que queda claro que no es que los medios se inventen cosas (sí, los médicos también se inventan enfermedades cuando vas a verles para operarte y así puedas seguir cobrando... Y los abogados se inventan pleitos para embaucar clientes, y los ingenieros retrasan la finalización de las obras a propósito... ¡Amos, anda!) sino que desde dentro de la propia candidatura hay gente que no sabe tener la boca cerrada y se va de la lengua. Kaká, CR7 si se renegocia, tal vez Cesc, dos a elegir entre el pack Xabi Alonso, Villa y Silva, repescar a Negredo y tal vez a Granero, y el sueño de un Ribery que prefiere el Barça.

300 millones de euros de una tacada, más o menos y a bote pronto. Lo mismo que todos le criticamos a Calderón, con el atenuante (si es que se puede llamar así) de que éste lo hizo en tres años. En cualquier caso, yo no me lo creo, el Madrid no está en disposición siquiera de llegar a los 200 y eso vendiendo a tres o cuatro por los que te den pasta de verdad. Todo dependerá, además, de lo que gasten Milan, Chelsea y City este próximo mercado estival, porque si ellos se mueven se encarecerán los precios muchísimo y estaremos en una situación en la que será casi imposible fichar nombres.

Sí, no va a ser fácil, que nadie empiece a desbarrar pidiendo tropecientos cracks. Entre la limpia que hay que hacer (y que costará un pastizal) y lo que hay que fichar, el proyecto que llegue no podrá consolidarse, con suerte, hasta dentro de dos temporadas. Sea quien sea el presidente, que esto no es una SAD y aquí nadie pone pasta de su bolsillo, en todo caso se la lleva. En cualquier caso, la carrera ha comenzado. Al que gane, desearle que no se nos muera del susto cuando vea el estado de las arcas del club y que no puede hacer absolutamente nada al estar atado de pies y manos.

Hoy, ojeando y hojeando la Prensa, vuelve a llamarme la atención una información de nuevo de La Stampa. Por lo visto un tal Labinot Harbuzi, ex compañero de Drenthe en el Feyenoord, ha declarado que el holandés le dijo que todo el mundo en el vestuario del Madrid sabe que Ibrahimovic está atado para la temporada que viene...

Por cierto, un abrazo fuerte a De la Red, cuyo corazón ha vuelto a fallarle. Lo dijo él, su mujer y su hijo son más importantes que volver a jugar al fútbol, y tiene la pinta de que lo segundo no lo va a poder volver a hacer nunca más. Suerte y ánimo, Rubén. La vida no se acaba en un balón, afortunadamente.

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